El siglo XX trajo consigo una nueva
focalización de los temas en la escultura pública. Si,
anteriormente, los monumentos eran hitos donde poner de relieve las
hazañas o proezas de determinadas personalidades, los hechos
heroicos que pervivieron en la historia o la dignidad de personajes
destacados por uno u otro motivo, al traspasar la mitad del siglo
pasado comienza a erigirse una serie de monumentos, de esculturas
urbanas, donde el tema de homenaje desciende a lo popular, a los
temas identitarios de cada localidad e, incluso, a oficios y
profesiones que vislumbrando el siglo XXI corrían riesgo de
desaparecer.
Esparteros, encajeras, pescateros,
alfareros, lecheras, agricultores, fueron ocupando con su inmovilidad
sitios de la ciudad y rincones de la memoria, y dejándonos patente
su existencia imprescindible en la vida cotidiana de un tiempo no tan
lejano.
Entre esos oficios hay uno que
permanece y reaparece, cada año, cuando el primer aire del norte se
decide a hacer bajar las temperaturas hasta el punto de hacernos
sacar la bufanda y los guantes del armario.
Un día cualquiera de
octubre, o de noviembre si estamos más al sur, aparecen las
castañeras apostadas en los rincones más transitados de la ciudad,
como auspiciadoras del invierno, invitándonos a comprar una pequeña
calefacción portátil que, además, nos permite degustar uno de los
frutos más exquisitos del otoño.
Bien es verdad que, algún año, el
oficio no se ha dejado ver hasta bien entrada la estación, pero de lo
que no hay duda es de que, en el periodo previo a la Navidad, en
Adviento, las castañeras se colocan entre tenderetes de artesanías,
junto a la fachada minimalista de un banco o frente a los grandes
almacenes más concurridos en esas fechas y nos proporcionan un
cucurucho que antaño, además, contenía noticias y carteleras,
lleno de castañas recién asadas, y cuyo sabor no sabemos disociar
de esa época del año.
Ya en los años sesenta hubo un artista
gráfico que dignificó el oficio haciéndolo protagonista de un
cuento troquelado que formó parte de la infancia de muchos
españoles. Ferrándiz, el dibujante de caritas dulces, nos hizo
valorar los sinsabores de ese oficio en Mariúca la castañera.
A finales de siglo, en 1999, la ONCE
regaló a la ciudad de Palencia una escultura que
fue colocada en la transitada Calle Mayor palentina.
Se trata de una obra pequeña, que
muestra a la castañera ante el brasero, con vestidura hasta los
pies, toquilla de lana y pañoleta en la cabeza.
De volúmenes rotundos, desecha el realismo detallista de las formas centrando el foco de atracción en la actitud. En
su reducido espacio la figura permanece atenta a la rasera que
sostiene en una de sus manos o, puede ser, mantiene la mirada perdida
mientras piensa en cómo afrontar el día siguiente.
Lo más sorprendente nos atrapa cuando
leemos la placa que aparece en el pedestal:
“LA CASTAÑERA” Autor DANIEL CALVO
PÉREZ (CIEGO).
Es la obra de un artista que ha
configurado los volúmenes basándose en el tacto, que ha modelado
cada pliegue, cada detalle, prefigurándolo bajo las huellas de sus
dedos y que, como resultado, nos ha regalado la vista con la figura
de un oficio que forma parte de nuestra memoria emotiva.
Una reproducción de la escultura forma
parte del denominado Museo Tiflológico, concebido por la ONCE e inaugurado en 1992 para
que los visitantes puedan tocar el arte sin cortapisas y apreciar
con sus dedos las pinceladas, las texturas y las formas de las obras
expuestas; obras que forman el patrimonio cultural de la organización
y que, en su mayoría, han salido de las manos de personas que, frenadas por su condición física, demuestran que su voluntad no
tiene límites.
FUENTES:
"La castañera", en Museo Tiflológico. ONCE [En línea] <museo.once.es/home.cfm?id=42&nivel=1&detallep=101>
Imagen de Mariúca la castañera en Pinterest [En línea] <www.pinterest.com/pin/389561436491008889>
Muchas gracias, Mariángeles, por este nuevo artìculo. ¡Preciosa historia de Navidad! Felices fiestas y un abrazo desde Medellín, Ana
ResponderEliminarQuien diría que ha sido un invidente el autor, estoy sorprendido......
ResponderEliminarFelices Fiestas Mª Ángeles.........